Palo Alto Networks y Google Cloud han anunciado una ampliación significativa de su colaboración estratégica, con el objetivo claro de facilitar a las empresas la aceleración de sus proyectos en la nube y en inteligencia artificial (IA), incluyendo la emergente IA agéntica que puede actuar de manera más autónoma, sin convertir cada despliegue en una fuente potencial de riesgo. Este movimiento se produce en un momento en el que la seguridad en la infraestructura de IA está dejando de ser un paso final en el proceso de implementación para convertirse en un requisito previo, donde primero se construyen controles robustos y luego se escala con confianza.
La alianza combina dos componentes fundamentales que, para 2026, ya serán inseparables en muchas organizaciones: la infraestructura de IA, donde se entrenan y ejecutan modelos, y las medidas de seguridad que la rodean, desde la protección del código y la cadena de suministro hasta la seguridad en producción. En la práctica, la integración de Prisma AIRS, la plataforma de seguridad de IA de Palo Alto Networks, con servicios de Google Cloud como Vertex AI y Agent Engine, busca cubrir todo el ciclo, desde el desarrollo hasta la operación de cargas de trabajo reales.
Para los clientes, esto significa una seguridad “de extremo a extremo” con menos fricción operativa. La iniciativa promete cerrar la brecha tradicional entre lo que crea el equipo de producto y lo que puede gobernar el equipo de seguridad, promoviendo un enfoque “de código a nube”: proteger datos y cargas de IA en Google Cloud y asegurar las herramientas clave del ciclo de desarrollo, como el Agent Development Kit (ADK). En la práctica, esto incluirá capacidades específicas como la gestión de postura de IA para visibilidad y control, seguridad en tiempo de ejecución para detectar y detener abusos en producción, seguridad de agentes (que toman decisiones y ejecutan acciones), pruebas proactivas mediante Red Teaming y la evaluación de vulnerabilidades en modelos.
El interés en fortalecer la seguridad de la IA se refleja en datos del informe “State of Cloud 2025” de Palo Alto Networks, que indica que el 99 % de los encuestados sufrió al menos un ataque contra su infraestructura de IA en el último año, evidenciando la creciente exposición y la necesidad de medidas integradas. Además, la alianza también abarca soluciones tradicionales de ciberseguridad, como firewalls VM-Series que se integran más profundamente para mantener políticas consistentes en entornos híbridos y multicloud, así como el reforzamiento del enfoque SASE con Prisma SASE y Prisma Access sobre la red de Google, garantizando una experiencia fluida y segura para usuarios distribuidos entre diferentes ubicaciones y dispositivos.
Este acuerdo, además de sus beneficios técnicos, tiene un impacto económico relevante. Se estima que la colaboración multianual podría alcanzar los 10.000 millones de dólares, según fuentes de Reuters. Como parte de la estrategia, Palo Alto migrará cargas internas relevantes a Google Cloud y utilizará tecnología como Vertex AI y los modelos Gemini para potenciar funciones de copilotos inteligentes, mostrando una operación en la que se alinean estrechamente las plataformas tecnológicas de ambas compañías.
El momento es crucial debido a la naturaleza de la IA agéntica, donde los modelos que actúan en nombre de los usuarios generan nuevos niveles de riesgo. Si un modelo simplemente responde, el daño potencial puede estar en la respuesta misma; pero si un agente puede tomar decisiones, realizar cambios o ejecutar acciones en sistemas críticos, el riesgo adquiere un carácter más complejo, asemejándose a dar credenciales a un “usuario” que además es software.
Es por ello que ambas firmas resaltan la importancia de eliminar la fricción entre desarrollo y seguridad, construyendo controles nativos en todo el ciclo de vida de la IA. La meta es que las organizaciones puedan avanzar con confianza, priorizando casos de uso en los que puedan operar garantizando la seguridad, en lugar de temer por riesgos que aún no controlan. La apuesta por la “plataformización” busca simplificar la gestión, reducir costes operativos y ofrecer una visión unificada desde una consola integrada, facilitando así una adopción más segura y eficaz de la IA en las empresas.